Revisión del tradicional Juego de la Oca que todos conocemos, basado en distintas temáticas y regiones de nuestra geografía, recorriendo su cultura, tradiciones, monumentos, gastronomía y personajes ilustres a través de sus 63 casillas, con un enfoque didáctico y cultural.

Navarra, un pequeño reino conquistador. Más allá de las batallas, a quien de verdad logra conquistar es a sus visitantes. Un Reyno agradecido y orgulloso de contener tanta belleza, y deseoso de compartirla con quienes se acerquen a descubrirla. Una tierra ésta donde podremos disfrutar de múltiples actividades y experiencias de lo más variopintas; o satisfacer esos momentos en los que necesitamos desconectar; o alejarnos del trajín de las urbes para sumergirnos en una naturaleza exuberante.

La sabiduría popular dice que en el norte se come muy bien, y a quién no le apetece satisfacer plenamente el paladar. Pues en Navarra encontraremos una mesa de lujo donde degustar sus carnes, sus verduras, los pinchos en los bares –mención especial para el pincho de txistorra–, platos del más alto nivel en sus restaurantes, sus quesos, sus vinos, sus pimientos del piquillo, sus dulces… Muchos de estos productos alardean con sus Denominaciones de Origen.

Navarra ha sido y es encrucijada de caminos. En ella han dejado su impronta pueblos prehistóricos, romanos, musulmanes y el esplendor cristiano; todo ello hace de sus pueblos y ciudades un destino de una riqueza artística envidiable.

Navarra: un Reyno pequeño, sí, pero sin límites.